Dra. Milagros Cecilia Huamán Castro
Docente de posgrado– USMP
https://orcid.org/0000-0002-1761-0118
Los medios de comunicación en la actualidad se enfrentan a una transformación digital debido a la intervención disruptiva de la tecnología. Entre ellas la más significativa es la Inteligencia Artificial (IA) ya que está cambiando la forma en la que se crea, distribuye y consume la información. Así, para los comunicadores significa grandes oportunidades, pero también múltiples retos.
La IA ha transformado la forma en que los comunicadores interactúan con el público, ya que el aprendizaje automático, la minería de datos y los algoritmos de procesamiento de lenguaje se han incorporado en las diferentes etapas de la producción informativa (Baker & Larson, 2020). La IA ha cambiado los procesos de la comunicación, identificándose beneficios y retos, así como una adaptación necesaria de los comunicadores del siglo XXI, donde los algoritmos y la automatización tienen un papel muy importante en la producción de las noticias.
Según el informe de Reuters Institute for the Study of Journalism (2021) la inteligencia artificial tiene el potencial de mejorar la eficiencia de las redacciones de tareas repetitivas como la transcripción de entrevistas, la redacción de resúmenes y reportes. Lo cual permite a los comunicadores concentrarse en el análisis y la investigación, fortaleciendo así la calidad del producto.
Las plataformas como Google News o Facebook utilizan algoritmos para adaptar las noticias a los intereses de los usuarios, generándose así una experiencia de consumo informativo más personalizado (Chyi, 2022). También se cuenta con herramientas de IA que son generadores de texto automático, las cuales pueden generar reportes sobre eventos recurrentes (deportes, informes meteorológicos, informes financieros, etc.) sin la participación del hombre, por ello libera a los comunicadores para concentrarse en actividades más complejas de investigación (Silverman, 2021).
Por otro lado, para el periodismo de datos que tiene que trabajar con la interpretación de grandes bases de datos, la IA es un gran soporte para identificar patrones, por eso se puede trabajar mejores temas como la cobertura de crisis sociales y políticas, donde la precisión y el análisis profundo son esenciales para generar una narrativa informativa sólida y veraz (Lutz & Doe, 2020).
Son múltiples las ventajas de la integración de la IA a las comunicaciones, pero también implica retos éticos y sociales. Entre los más significativos está la propagación de sesgos en lo algoritmos que generan noticias, ya que la IA al ser entrenada con datos históricos, podría reflejar los prejuicios que existen en la sociedad, lo cual puede producir contenido sesgado que distorsione la información que se brinda al público (O’Neil, 2016). Además, existe la preocupación de que la IA podría ser utilizada para producir información de forma masiva sin tener el rigor profesional que debe guiar a los comunicadores en su labor y compromiso social, puesto que la automatización de ciertas tareas puede afectar la calidad del producto, si los algoritmos priorizan la cantidad sobre la calidad.
Además, el fenómeno de las fake news o noticias falsas también se potencian sobre la base de la IA, ya que los algoritmos se manipulan difundiendo información distorsionada. La European Commission (2021) indica que los bots impulsados por IA son los responsables de amplificar la desinformación en múltiples plataformas de redes sociales, lo cual afecta la labor del periodista. Sumado a ello, existe la problemática que algunos de los roles laborales del comunicador desaparezcan, generando un análisis reflexivo en el futuro del profesional. Así, los comunicadores del siglo XXI se deben adaptar a un entorno de trabajo más tecnológico, donde se empoderen de la IA para integrarla a su labor profesional (Pew Research Center, 2022).
Finalmente, el reto de los comunicadores del siglo XXI es aprovechar al máximo las múltiples oportunidades que ofrece la IA adaptándose a un entorno que evoluciona permanentemente, para ello debe incorporar competencias tecnológicas basadas en IA y comprender los principios detrás de los algoritmos. El informe de PwC (2023) nos indica que se debe invertir en la capacitación continua de los equipos profesionales, para el uso ético de la IA y la toma de decisiones basada en datos.
Referencias
Baker, C. E., & Larson, J. (2020). Artificial Intelligence in Journalism: A New Era for News Production. Journalism Studies, 21(4), 539-558.
Chyi, H. I. (2022). Personalization in Journalism: How AI and Algorithms Shape News Consumption. Journalism & Mass Communication Quarterly, 99(2), 353-371.
European Commission. (2021). The Impact of AI on Journalism and the Fight Against Fake News. European Union.
Helberger, N. (2022). Personalization and Democracy: The Role of AI in News Selection. Media, Culture & Society, 44(3), 456-473.
O’Neil, C. (2016). Weapons of Math Destruction: How Big Data Increases Inequality and Threatens Democracy. Crown Publishing Group.
Pew Research Center. (2022). The State of AI and Automation in Journalism. Pew Research.
PwC. (2023). AI in Media: The Future of Journalism. PwC Report.
Reuters Institute for the Study of Journalism. (2021). Digital News Report 2021. Oxford University.
Silverman, C. (2021). Automated Journalism: How AI is Changing the News Industry. Columbia Journalism Review.