Patrick O´Brian reconstruye toda una civilización y nos presenta los arcanos de un mundo terriblemente hostial y cruel pero valiente. Todas las armas navales ocupan su lugar y funcionan; los combates son conmovedores y el quehacer cotidiano de un navío de vela se nos muestra a la perfección.
Lo que da, sin embargo, su mayor fuerza a la novela es la honesta exploración de la humanidad de los personajes, su vitalidad y su sensualidad.